La idea al escribir este documento es hacerte reflexionar compartiendo mi experiencia y alguna información que durante este tiempo he ido recopilando.
Mi objetivo es que aproveches mi experiencia, antes de que te inicies en el mundo de las inversiones financieras. No son recetas mágicas, pero sí creo que son las que debes seriamente considerar para no perder dinero antes de empezar a ganarlo.
Esta iniciativa surge, porque me gustaría que no cayeras en los mismos errores que yo. Como muchos, mis elevadas expectativas cuando me inicié en este mundo de las inversiones financieras se fueron frustrando con la práctica.
Quiero agradecer a José Luís Alvarez CEO de HollyMontt la oportunidad de publicar en el blog de HollyMontt y la ayuda que me ha brindado en todo momento para completar este escrito con datos e información adicional.
La realidad de los mercados financieros
Los mercados financieros no están únicamente para hacer trading. Es más, el trading, entendido como operar a muy corto plazo mediante el Market Timming, es un trabajo reservado para inversores avanzados o profesionales. Sin ningún tipo de duda, el trading no es para un inversor que se inicia en los mercados. Sacar beneficios en los mercados financieros con el trading mediante el Market Timming nos es tan fácil como nos lo venden, incluso para un inversor avanzado o profesional.
Un profesional del trading dispone de tiempo, medios tecnológicos y capacidad financiera, desarrolla modelos, diseña una estrategia y aplica una estudiada sistemática, y lo más importante, tiene la experiencia y conocimientos para operar adecuadamente en los mercados financieros.
En los mercados financieros no se aprende únicamente con la experiencia. La prueba y error y construir un modelo o sacar conclusiones a partir de la práctica, no funciona en un entorno de tantas variables como es el mercado financiero. La simplificación nos conduce a grandes errores. Aprender mediante la experiencia te puede salir demasiado caro. Es necesario adquirir previamente sólidos y rigurosos conocimientos. Aplicando estos conocimientos es cuándo podremos aprender con la experiencia.
La formación necesaria para poder invertir en los mercados financieros, tanto para hacer trading como para construir una cartera de activos con una visión más a largo plazo, no se adquiere con unos pocos tutoriales o cursos. Esto es especialmente relevante cuando estos cursos están directa o indirectamente patrocinados por ciertas plataformas con un claro interés comercial, para que operes lo antes posible. También, evitaría cursos o recomendaciones de personas con escasa formación y experiencia (3 o 4 años de experiencia no es para nada experiencia suficiente en el mundo financiero). Quizás empaticen con nosotros, porque somos jóvenes, pero en este mundo de las inversiones financieras la experiencia se mide por el número de crisis financieras que has vivido como inversor (“una o ninguna” tampoco es experiencia suficiente).
Los foros están bien si sabes traducir e interpretar los mensajes que se van dando en ellos, e identificar aquellos que están “patrocinados”.
Se necesita dedicar cierto tiempo para adquirir los principios básicos para que tengas un buen criterio a la hora de invertir. Es importante ir a fuentes de calidad.
Si no te formas adecuadamente y adquirir progresivamente experiencia, no vas a tener los resultados que esperabas
Para construir una cartera necesitas saber cuál es tu perfil inversor y que la cartera que vayas a construir sea la adecuada a este. Una cartera no es un agregado de títulos, que vamos seleccionando con una visión oportunista en base a sus expectativas de rentabilidad. Para construir una cartera has de seguir modelos y metodologías de construcción de estas, definir un objetivo de inversión, un rango o nivel de riesgo y una serie de estrategias a seguir durante su gestión. Y para eso, necesitas formación para adquirir esos conocimientos.
Tener en algún momento ganancias, no quiere decir, que lo estemos haciendo bien, lo más probable es que sea consecuencia de la suerte. Para un iniciado y con toda probabilidad, invirtiendo a través de un producto financiero gestionado por un profesional, obtendrá mejores resultados.
